Turismo termal en Mendoza: vino, montañas y aguas curativas
La provincia de Mendoza no solo es conocida por sus vinos mundialmente premiados y su majestuoso entorno cordillerano, sino también por ofrecer una excelente propuesta de aguas termales.

Esta combinación de paisajes naturales, enología y aguas curativas convierte a Mendoza en un destino de bienestar único en Argentina.
Un entorno natural privilegiado
Ubicada al pie de la Cordillera de los Andes, Mendoza brinda un paisaje montañoso imponente que enmarca cada experiencia termal.
Las aguas que surgen en esta región tienen origen volcánico o profundo, lo que les confiere propiedades minerales beneficiosas para la salud.
Además, la posibilidad de combinar actividades de aventura, como trekking o rafting, con momentos de relajación en aguas termales, hacen de Mendoza un lugar perfecto para una escapada integral.
Las principales termas de Mendoza
Termas de Cacheuta

Probablemente las más conocidas de la provincia, las Termas de Cacheuta están ubicadas a solo 40 km de la ciudad de Mendoza, en un entorno montañoso espectacular.
El parque termal cuenta con piscinas al aire libre y cubiertas, de distintas temperaturas y con circuitos de hidroterapia.
El complejo incluye un hotel-spa con tratamientos de bienestar, gastronomía regional y acceso exclusivo a las termas.
Para quienes no se alojan en el hotel, también existe la opción del parque termal de día, ideal para disfrutar en familia o en pareja.
Termas de Los Molles

Ubicadas en el sur mendocino, sobre la Ruta 222, estas termas son ideales para quienes buscan tranquilidad y conexión con la naturaleza.
A unos 1.800 metros sobre el nivel del mar, las Termas de Los Molles poseen aguas sulfurosas y ferruginosas, especialmente indicadas para afecciones reumáticas y dermatológicas.
Además del área termal, en Los Molles se pueden practicar actividades como senderismo, pesca y paseos a caballo.
Hay opciones de alojamiento en cabañas y hosterías con vista a las montañas.
Termas del Cajón Grande

Este pequeño paraíso termal se encuentra en Malargüe, en la zona sur de Mendoza.
A 2.400 metros de altura, el complejo se caracteriza por su entorno agreste y poco intervenido, lo que permite una experiencia más rústica y auténtica.
Las aguas de Termas del ajón Grande tienen propiedades minerales relajantes, y se accede al lugar con excursiones organizadas o vehículos 4x4.
Es una propuesta ideal para el turismo aventura combinado con relax.
El vino como complemento del bienestar

Mendoza es sinónimo de vino, y el turismo enológico es una de las grandes atracciones de la provincia.
Muchas bodegas ofrecen experiencias sensoriales que combinan visitas guiadas, degustaciones y almuerzos gourmet, ideales para complementar una jornada termal.
Algunos alojamientos incluso ofrecen circuitos wellness que combinan spa, vinos y gastronomía saludable, creando una experiencia integral de descanso y disfrute.
Beneficios terapéuticos de las aguas termales mendocinas
Las aguas de Mendoza son ricas en minerales como azufre, hierro, sodio y calcio. Estos componentes aportan múltiples beneficios terapéuticos, como:
- Alivio de dolencias reumáticas y musculares.
- Mejora de la circulación sanguínea.
- Estimulación del sistema inmunológico.
- Propiedades descongestivas y relajantes.
Cada complejo termal suele contar con información específica sobre las propiedades de sus aguas, así como recomendaciones de uso según el tipo de visitante.
Consejos para planificar tu escapada termal a Mendoza
- Época ideal: otoño y primavera son las estaciones más recomendadas, con temperaturas templadas y paisajes de gran belleza.
- Reservas anticipadas: los complejos como Cacheuta suelen tener alta demanda. Es recomendable reservar con tiempo tanto el ingreso como el alojamiento.
- Transporte: se puede llegar desde la ciudad de Mendoza en auto particular o mediante excursiones organizadas.
- Ropa y equipamiento: traje de baño, calzado cómodo, protector solar y botella de agua son esenciales para disfrutar del día.
El turismo termal en Mendoza ofrece una experiencia completa que fusiona salud, naturaleza, placer y cultura.
Desde las relajantes piletas de Cacheuta hasta los paisajes indómitos del Cajón Grande, pasando por las aguas curativas de Los Molles, la provincia invita a sumergirse en un mundo de bienestar, rodeado de montañas y viñedos.
Una escapada a Mendoza es mucho más que un viaje: es una oportunidad para reconectar cuerpo y mente, mientras se disfruta de lo mejor que Argentina tiene para ofrecer.
